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Salón nacional de dibujo 

Franklin Aguirre.
Enero 2024
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"De otro lado, Rodrigo Spinel nos invita a ver el universo macro que es desapercibido por las condiciones cotidianas. Los billetes son intrincados y sofisticados grabados que contienen información patrimonial que es resuelta de manera sintética, sumada a un complejo sistema de seguridad que busca evitar la falsificación. Rodrigo rescata el tradicional grabado Renacentista y la precisión del dibujo técnico que emergió en el siglo XIX, escalándolo a composiciones con rigurosas operaciones matemáticas y una bella e impecable abstración." 

Los billetes y estampillas de Rodrigo Spinel. 

Diego Garzón Carrillo.
mayo 8 2022 
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Podría decirse que en el trabajo de Rodrigo Spinel, detrás del acercamiento natural al dibujo desde que estudió arquitectura en Los Andes, hay un viaje en el tiempo que busca conectar al espectador con imágenes que hicieron parte del pasado. Pero no solo busca mostrarlas porque sí, sino que detrás de cada obra hay un proceso lento, de mucho tiempo, como una metáfora de reconstruir los días idos. 

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En algunas de sus series aparecen billetes que predominaban en los años 90; en otras, las estampillas que fueron desapareciendo para dar paso a una simple “guía” con la información necesaria del envío de turno. Spinel reconstruye con paciencia esa iconografía que desapareció y que estaba presente en la cotidianidad de esos años, en las entonces cartas que llegaban con esa pequeña imagen que aludía a la riqueza del territorio, a los paisajes, las orquídeas, la bandera, el escudo, entre tantos otros elementos representativos del país. Lo mismo en los billetes que, además de su denominación, expone estas postales a veces invisibles. 

 

Además de la conciencia de la línea y su repetición, a Spinel le interesó también el valor perdido de estas imágenes. Y, de paso, el valor del coleccionismo que busca rescatarlas, de personas que las guardan para conservar parte de ese pasado que se va esfumando. El artista, en su proceso solitario, repasa con las líneas del dibujo no solo lo que ya no tiene valor económico sino también como elemento visual. Es una reconstrucción de lo que alguna vez fue importante, en una clara metáfora de la vida. 

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Spinel se presentó en la Feria del Millón por primera vez en 2018 y desde entonces su obra jugaba con la línea, con figuras geométricas no siempre perfectas, en donde había una clara referencia al ladrillo, un elemento muy representativo en la arquitectura bogotana. Desde la segunda mitad del siglo XX, en la capital se hizo cada vez más presente este material que contrasta con los cerros orientales. Esos dibujos de tinta china planteaban variaciones donde quedaba en evidencia una consciente imperfección. 

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